Ante todo acordaros de que las gafas reticulares son solo una herramienta para la vista. Para recuperar visión siempre dependerá de nosotros mismos, nunca de algo externo. También es cierto que las gafas reticulares tienen tanto éxito debido a que la gente siente que no depende de unas gafas convencionales y que con las reticulares es más autónoma. La diferencia básica entre unas gafas graduadas y unas reticulares es que la visión en las reticulares dependerá más de tu capacidad de relajación ocular y las graduadas ya te hacen el trabajo, pero a cambio pierdes más tu propia capacidad y por lo tanto pueden reducirse las funciones de los ojos en la mayoría de los casos. De todas formas nuestra intención en la venta de estas gafas no es suplir las gafas graduadas (aunque hay gente que lo ha hecho), sino que la gente sea más autónoma, consciente y que aprenda a relajarse.

Todos los agujeros, tanto redondos, cuadrados como hexagonales tienen forma cónica. Filtran la luz y la luminosidad y sirven para cualquier problema de refracción de los ojos (miopía, hipermetropía, astigmatismo, presbicia, ojo vago, estrabismo, etc….). Para graduaciones altas a partir de 6 dioptras aconsejamos las hexagonales y hasta 6 dioptras las cónicas.


Antes de dar explicaciones, debido a la cantidad de gafas de este tipo que hay en internet, os aconsejo que observéis la relación precio y calidad, ya que vale la pena tenerlo en cuenta. Una característica aconsejable es que tengan las rejillas la estructura cónica, porque quitan los halos de luz que molestan.

¿Cómo Usarlas?

Hipermetropía, Presbicia, Miopía y Astigmatismo : para leer, trabajar en el ordenador, ver la televisión o cualquier tipo de pantalla y para pasear por el sol.

Estrabismo o diferencias entre los ojos: ayudan a una mejor integración de los ojos.

Cataratas: son la única clase de anteojos que pueden dar una visión nítida en cataratas no avanzadas. También hemos visto que en cataratas operadas les relaja la vista, ya que evita que entre un exceso de luz.

Albinismo: reducen el impacto de la luz solar, muchas veces mejor que las gafas de sol.

No son aconsejables sobre todo al principio para conducir, ni para acciones que requieran movimientos rápidos. Tampoco para leer en condiciones de luz escasa.